A sus 40 años, Joe Flacco vuelve a hacer lo que mejor sabe: rescatar equipos en crisis. Cincinnati Bengals adquirió al veterano quarterback en un trade con Cleveland Browns el martes 7 de octubre, apenas dos días después de su tercera derrota consecutiva y en medio de la desesperación por encontrar un reemplazo efectivo para el lesionado Joe Burrow.
El intercambio fue sencillo pero importante: los Bengals enviaron una selección de quinta ronda del draft 2026 a los Browns y recibieron a Flacco más una sexta ronda. Un precio bajo para un quarterback que, aunque viene de cuatro juegos irregulares con Cleveland (1-3 de récord, 58,1% de completados, dos touchdowns y seis intercepciones), tiene algo que ningún otro disponible puede ofrecer: experiencia comprobada en momentos límite.
El patrón que se repite

Esta es la tercera vez en los últimos tres años que Flacco llega como salvador de último momento a un equipo necesitado. En 2023, los Browns lo firmaron de su practice squad cuando Deshaun Watson cayó lesionado, y el resultado fue mágico: cinco victorias en los últimos seis juegos de temporada regular que llevaron a Cleveland a playoffs. Su actuación le valió el premio de Jugador Comeback del Año de la NFL.
Antes fue con los Jets en 2021, y ahora con los Bengals en 2025. El patrón es claro: cuando un equipo con aspiraciones pierde a su quarterback titular y necesita experiencia inmediata, Flacco es el nombre que aparece.
“Joe es un quarterback experimentado con historial ganador”, declaró el entrenador Zac Taylor al anunciar el trade. “Es un líder con un conjunto de habilidades que encaja bien con nuestro personal. Tiene un brazo fuerte y estamos emocionados de tenerlo”.
Por qué Cincinnati necesitaba actuar
La situación de los Bengals era insostenible. Joe Burrow sufrió una lesión grado 3 de “turf toe” en la Semana 2 contra Jacksonville Jaguars, requiriendo cirugía y colocándolo en la lista de reserva por lesiones con proyección de ausencia de al menos tres meses. Su posible regreso no sería antes de las Semanas 15 o 16, si es que los Bengals permanecen en contención.
El problema es que Jake Browning, quien había tenido un récord de 4-3 como reemplazo de Burrow en 2023, colapsó por completo esta temporada. En cuatro juegos lanzó ocho intercepciones, tres de ellas en la derrota 37-24 ante Detroit Lions que precipitó el movimiento. Cincinnati fue superado 113-37 en sus últimas tres derrotas, con una ofensa que promedia apenas 17 puntos por partido, cuarta peor de la liga.
El arma secreta: conocimiento de la división
Flacco no es solo un veterano cualquiera para los Bengals. Es un veterano del AFC North que conoce los rivales a la perfección. Pasó sus primeros 11 años con Baltimore Ravens, donde fue MVP del Super Bowl XLVII en 2013, y acaba de jugar cuatro partidos esta temporada con Cleveland.
Con cinco juegos divisionales pendientes, incluyendo uno en Acción de Gracias en Baltimore, ese conocimiento es invaluable. Cincinnati está 2-3 y en segundo lugar de la división, apenas un juego detrás de Pittsburgh Steelers (3-1). La ventana para rescatar la temporada sigue abierta, pero se cierra rápido.
“Tiene armas ofensivas increíbles ahora”, señaló el receptor Ja’Marr Chase sobre la llegada de Flacco. “Esto demuestra que el equipo cree que todavía tenemos una oportunidad esta temporada”. Con Chase y Tee Higgins como receptores, Flacco tendrá un arsenal muy superior al que tuvo en Cleveland, donde aun así logró mantener competitivo al equipo.
Los Bengals esperan que Flacco esté listo para debutar este domingo en Green Bay contra los Packers, dando inicio a su tercera aventura como salvador de emergencia en la NFL. La pregunta no es si puede aprender el sistema rápido, sino si la magia de 2023 puede repetirse una vez más.