El arranque con cinco victorias y una derrota en esta temporada empezó a sembrar buenas sensaciones en los Tampa Bay Buccaneers y todas las luces apuntan a una sola figura: su quarterback Baker Mayfield, que ahora empezó a codearse con sus principales referentes en la historia grande de la NFL.
Como si se tratara del ave fénix, después de varios años erráticos en Cleveland Browns, Carolina Panthers y Los Angeles Rams, Mayfield encontró su lugar en los Buccaneers. La franquicia de Florida apostó de lleno por un mariscal que generaba más dudas que certezas. Ya establecido como titular, el oriundo de Texas se las ingenió para superarse una y otra vez en el aspecto estadístico y llevar a los Bucs a ganar dos títulos divisionales consecutivos, que no es poca cosa en una liga cada vez más exigente.
Pero todavía hay más. El auspicioso presente del mariscal de campo de los Buccaneers lo instaló automáticamente en un cuadro de honor en la NFL junto a dos leyendas como Tom Brady y Peyton Manning. En concreto, los tres lograron 80 o más touchdowns en sus primeros 40 partidos como titulares con un nuevo equipo y no es casualidad que varios especialistas ya lo tilden de “quarterback franquicia”. De hecho, en los primeros seis partidos de esta temporada, Mayfield ya completó 129 pases sobre 195 intentos, 12 touchdowns y apenas una interferencia. Toda una señal de que el futuro es más que promisorio en la franquicia de Florida, que ya sueña con su propio MVP.
Un arranque prometedor
“Apenas estamos empezando”, fue el mensaje de Baker Mayfield después de la victoria por 30 a 19 frente a los San Francisco 49ers, en un partido que fue todo ganancia para los Tampa Bay Buccaneers, consolidados definitivamente como un equipo a vencer en la NFC Sur. En ese juego, el QB formado en los Oklahoma Sooners terminó con 17 pases completos para 256 yardas y dos touchdowns, en otra actuación promisoria en lo que va de la temporada.
Los elogios tampoco tardaron en llegar. “Tiene un don, un don que no se puede enseñar ni entrenar”, dijo el HC Todd Bowles, a la hora de resaltar la capacidad del quarterback de resolver jugadas, aún sin jugadores clave en la ofensiva como Mike Evans, Chris Godwin Jr. o Jalen McMillan.
En la misma sintonía que Bowles, su excompañero en la Universidad de Oklahoma y actual WR de los Bucs, Sterling Shepard, también dejó en claro que Mayfield “está jugando con mucha confianza”, lo que hace que el equipo crea mucho más en sus condiciones dentro y fuera del campo de juego.
“Estoy muy orgulloso de él y tengo muchas ganas de ver todas las cosas especiales que va a hacer esta temporada”, concluyó Shepard, otro de los referentes de un plantel que, casi sin proponérselo, se empezó a entusiasmar cada vez más con la idea de hacer historia en la NFL luego de un comienzo casi perfecto.