Los Playoffs de la National Football League (NFL) están cada semana más cerca y con ello los primeros equipos que han perdido la esperanza comienzan a quedar eliminados de la contienda por seguir jugando en enero. New Orleans Saints es uno de esos conjuntos que poca emoción ha podido generar en lo que va de la temporada, con puntos más bajos que altos, que ya comienzan a pensar en el próximo Draft y ver que elementos mantener o deshacerse para el año que viene.
Un equipo que cambió totalmente su estructura de cara a esta campaña, pero con un actual récord de 2-10 poco han podido mejorar comparado al 5-12 de la temporada previa bajo el comando de Denis Allen. Un staff de entrenadores completamente primerizo: con Kellen Moore como nuevo entrenador en jefe, Brandon Staley en su primer año como coordinador defensivo del equipo y Dug Nussmeier el entranador ofensivo; el único que cuenta con experiencia previa a nivel NFL ejerciendo su respectivo puesto es Staley.
Era evidente que los Saints encaraban una proceso de reconstrucción para este año, pero el panorama no lucía tan desalentador como quizás sí lo sea hoy en día. Se encuentran pagando $106,8 millones de dólares en “dead money” (salario de jugadores que ya no están en el equipo) y proyectan ser los que más gasten en este rubro para la temporada 2026 con $90 millones, solo $59.7 millones dedicados al salario de Derek Carr. Aún así, pareciera ver un pequeño reflejo de luz al final del túnel si uno intenta buscarle el lado positivo a esta franquicia.
¿Cuál sería el escenario ideal para New Orleans Saints para volver a competir en 2026?
A pesar de las negativas, el abanico está abierto de cara al futuro y dependerá que decisiones tome el gerente general Mickey Loomis en la próxima temporada baja. Primero lo primero, y está principalmente en ver de que manera rinden tanto Kellen Moore como Tyler Shough en el campo de juego. A partir de ahí, los Saints podrán ver que estrategias podrían ser efectivas para finalmente encarar la reconstrucción de manera positiva; cosa que no pudieron anticipar previo retiro de Drew Brees y desde entonces (2020) no ven los Playoffs.
El rendimiento del mariscal va a ser clave, para saber qué hacer con lo que de momento es la 3° selección para el Draft 2026. Teniendo en consideración que Tennesse Titans cuenta con Cam Ward y New York Giants con Jaxson Dart, a no ser ocurra un trade, New Orleans podría elegir al primer mariscal en una clase que si bien no es la más talentosa trae propuestas interesantes. Ahora, si Tyler Shough demuestra la madera para hacerse con el puesto, otra posibilidad a considerar es un trade-back para hacerse de más capital y re-construir la base de un equipo de por sí veterano.
Sino, otra de las alternativas estará en seleccionar una joya de talento defensivo y buscar un mariscal en agencia libre para pelearle el puesto al actual o seguir fomentando la competencia con Spencer Rattler. Son muchos los caminos que pueden tomar los Saints apuntando a la próxima temporada, y evaluando luego los resultados obtenidos, podría ser momento de re-considerar la continuidad de Mike Loomis en el puesto. El gerente general no ha podido construir un equipo de playoffs en los ocho años que estuvo al cargo sin Sean Payton o Drew Brees en los controles (2002-2005 y 2021-2025).