En la victoria 24-23 de los New England Patriots sobre Atlanta Falcons por la semana 9 de la temporada 2025 de la NFL, DeMario “Pop” Douglas terminó el partido con cuatro recepciones para 100 yardas y un touchdown que fue muy importante para que los de Foxborough se quedaran con el triunfo.
Tras la salida de Kayshon Boutte debido a una lesión en el tendón de la corva, el ex receptor abierto de Liberty Flames tomo la posta y marco el camino para conseguir el trabajado triunfo. Sin embargo, su rendimiento fue sobresaliente no solo por sus estadísticas finales, sino por el contexto que rodeó aquella tarde de domingo.
Después del juego, un visiblemente emocionado Pop Douglas contó que el día anterior al juego había recibido una noticia realmente devastadora. Su tío, quien fue una figura clave en su vida y mentor desde la infancia, había sido asesinado a tiros. A pesar de ese duro golpe, el WR de 24 años decidió jugar. “Sabía que él estaba conmigo”, dijo luego del encuentro.
DeMario Douglas y una actuación marcada por el dolor
Después de un comienzo lento de la temporada, Douglas ha aumentado su protagonismo con el correr de las ultimas semanas. El partido frente a Atlanta fue una gran muestra de ello. Su actuación no solo es descabale por sus números sino por la entereza con la que el joven receptor encaró el partido. Cada recepción fue una declaración de fortaleza, y luego del touchdown, al regresar a la banca fue recibido por sus compañeros con abrazos y palabras de aliento, mientras las cámaras captaban las lágrimas en sus ojos.
DeMario y su tío mantenían una relación muy estrecha. El tío fue uno de los principales apoyos en su desarrollo deportivo. Tal fue el vinculo que los unió que en su cinta ocular negra llevó escritas las palabras “WOP Forever” y “LL UNC”, un homenaje a quien lo apodó “Pop” cuando era niño.
Más allá del marcador y del impacto deportivo, la historia de DeMario Douglas representa el espíritu que los New England Patriots buscan recuperar: carácter, compromiso y humanidad. Aun con el dolor a flor de piel, el WR decidió jugar. Esto también sirve como un recordatorio que detrás de cada casco y cada estadística hay personas que viven, sufren y trascienden a través del deporte.
