Los Buffalo Bills le ganaron cómodamente a los Pittsburgh Steelers por 26 a 7 este pasado domingo. Con esta victoria, los dirigidos por Sean McDermott alcanzaron un récord de 8-4 y siguen de cerca a los New England Patriots en la pelea por el liderato de la AFC Este.
Los Bills empezaron el partido sufriendo, pero poco a poco se lograron imponer y construir la diferencia que finalmente mostró el marcador. La ofensiva comandada por Josh Allen continúa demostrando un gran nivel y se despachó con 372 yardas totales, 249 de ellas siendo por tierra.
Si bien para Buffalo esta victoria era fundamental, todas las miradas fueron para el último MVP, quien rompió un récord histórico de la NFL. El quarterback de los Bills superó a Cam Newton y se convirtió en el mariscal con más touchdowns terrestres en la historia de la liga.
Josh Allen, el hombre récord
El mariscal de campo de los Bills hizo historia en el segundo tiempo cuando alcanzó su touchdown número 76 por tierra en su carrera. La jugada llegó en el último cuarto con un acarreo de ocho yardas, y así Allen superó al MVP de 2015, Cam Newton, como el QB con más anotaciones terrestres en la historia de la NFL.
Recordemos que Cam Newton había roto, por mucho, el récord previo que pertenecía a Steve Young con 43 anotaciones. Además, en los últimos años se sumó a la pelea Jalen Hurts, que actualmente lleva 63 touchdowns terrestres, por lo que no sería sorpresa que él y Allen se disputen esta marca en los próximos años.
El QB de los Bills viene siendo, desde hace ya varias temporadas, uno de los jugadores más determinantes e importantes de toda la liga. Su impacto va mucho más allá de las estadísticas: es el motor absoluto de la ofensiva y del equipo entero. Allen se ha consolidado como la cara de la franquicia, y este nuevo récord no hace más que reforzar su lugar entre los mariscales más dominantes de los últimos años.