Kyle Shanahan confirmó públicamente que su relación con Brandon Aiyuk atraviesa un momento crítico dentro de la franquicia. El head coach de los San Francisco 49ers reveló que no mantiene contacto directo con el receptor desde hace varias semanas, una declaración que expone la profundidad del conflicto entre ambas partes. “No lo veo desde hace un mes”, expresó Shanahan al ser consultado por la situación de Aiyuk, dejando en evidencia el distanciamiento con uno de los jugadores más importantes del ataque de San Francisco en las últimas temporadas.
Cabe recordar que Aiyuk sufrió una rotura del ligamento cruzado anterior en la semana 7 de la temporada 2024, durante el partido ante Kansas City Chiefs, lesión que lo dejó fuera por el resto del año y le impidió volver a jugar desde entonces. El receptor se sometió a una cirugía y su regreso para la temporada 2025 era el principal objetivo, aunque su ausencia en reuniones obligatorias posteriores a la rehabilitación generó tensiones con la dirigencia. En ese contexto, los 49ers tomaron una medida extrema al anular los 27 millones de dólares garantizados de su contrato para 2026.
El pasado 13 de diciembre, la franquicia incluyó a Aiyuk en la lista de left squad (jugador que abandonó al equipo), una designación que le impide volver a jugar en lo que resta de la temporada. Este movimiento confirmó que la relación entre el receptor y los San Francisco 49ers se encuentra prácticamente rota. Al haber anulado las garantías de su contrato, la franquicia ahora podría desprenderse de Aiyuk sin afrontar las penalizaciones económicas habituales de un acuerdo de su magnitud, valuado en 120 millones de dólares por cuatro años
De Arizona State a la élite: El ascenso de Brandon Aiyuk
Brandon Aiyuk aterrizó en San Francisco en el Draft de 2020 como una apuesta personal de Kyle Shanahan. No tardó mucho en demostrar por qué los 49ers gastaron una primera ronda en él, su evolución fue constante, pasando de ser una promesa de Arizona State a convertirse en el receptor número uno del equipo.
Con más de 3,000 yardas acumuladas y una velocidad explosiva, Aiyuk se convirtió en el motor aéreo de unos 49ers que, literalmente, rozaron la gloria. Fue una pieza fundamental para llegar a tres finales de conferencia consecutivas, contra los Rams en 2022, los Eagles en 2023 y esa remontada épica frente a los Lions en 2024. Tras no haber podido conseguir el objetivo final en las dos primeras, por fin pudo jugar su primer Super Bowl, aunque se les escapó de las manos por nada frente a los Chiefs
Es increíble que, después de ser el alma de la ofensiva y dar resultados desde el día uno, hoy su relación con San Francisco esté en un punto de no retorno. Pasó de ser el héroe de la película a estar fuera por un conflicto que parece no tener vuelta atrás.